Primer partido de la escuela Dulce-Hans

Primer partido de la temporada.

Nervios e ilusión reflejados en los ojos de los jugadores, comienza el calentamiento, corriendo alrededor de la pista que va a ser nuestro terreno de juego. Ultimas instrucciones y salto inicial, comienza a botar el balón y las primeras sonrisas aparecen en el banquillo y las gradas. Pese a una buena selección de tiro, las primeras canastas no quieren entrar, nuestro rival con mejor porcentaje de aciertos toma la delantera, toca remar y así lo hacen, desde la defensa, con una presión que intenta ahogar el saque del rival y cuyos frutos se materializan en los primeros robos y canastas... ¡¡empieza la remontada!!. Los mofletes colorados en todos los jugadores hablan del nivel de tensión mientras siguen con la presión. Nuestro porcentaje de aciertos empieza a mejorar, acercándonos cada vez más en el marcador. Empezamos a disponer de más tiros  cargando el rebote ofensivo, llega la igualdad al marcador. Preguntas en el banquillo...¿como vamos?, ¿lo estamos haciendo bien?...¡¡más que bien!!.

La alternancia en el marcador domina los dos últimos  cuartos, sin que ninguno de los dos equipos baje los brazos. En un contraataque rival, uno de sus jugadores cae al suelo, pese al susto inicial el jugador quiere seguir, todos los jugadores aplauden, gran lección de deportividad de los pequeñines. Pitido final, empate a 20, justo marcador para dos equipos que lo dieron todo en un partido donde la ilusión y la diversión contagiaron tanto a jugadores como a la afición, que desde las gradas apoyaron en todo momento al equipo.

Gran día de baloncesto, orgullosos de nuestros pequeñines, 1, 2, 3 DULCE HANS!!!